¡Tengo un juanete!

El juanete (Hallux Valgus) es una artrosis, degeneración de la articulación, junto con una desviación del dedo causada por una mala pisada.

Y no, el juanete no se hereda, lo que heredamos es ¡la pisada!. En la mayoría de pacientes aparece cuando sus pies tienen tendencia al valgo/pisada pronada, el arco cae de más cuando apoyamos en el suelo, haciendo que la musculatura del pie trabaje de manera patológica y vaya deformando las articulaciones de éste. También existen otros factores no biomecánicos que influyen, como pueden ser los traumáticos y los metabólicos.

Existen varias soluciones cuando ya se han desarrollado, el tratamiento dependerá del grado de dolor que causen.

  • Si no duelen,  la mejor opción es utilizar plantillas personalizadas para corregir la deficiencia biomecánica, consiguiendo que la musculatura del pie trabaje correctamente y por tanto, decelerando el  proceso de degeneración de la articulación.
  • Si existe dolor de vez en cuando, las plantillas son una buena opción junto con los antiinflamatorios orales y/o tópicos.
  • Cuando el tratamiento conservador es insuficiente, y hay un dolor constante o la deformidad progresa rápidamente , en este caso la única opción es la cirugía.

Hoy en día existen técnicas de mínima invasión (MIS) en  la que se hace un corte de solo 5mm para la corrección (menos complicaciones, cicatrices apenas perceptibles, menor dolor post operatorio) y la baja es de menor tiempo que con la cirugía abierta convencional. La operación dura más o menos unos 60 minutos y no necesita hospitalización.

Los objetivos del procedimiento quirúrgico son: aliviar los síntomas, corregir la deformidad y restaurar la función de la articulación para una marcha adecuada. En nuestra Área de Podología derivamos a los mejores profesionales de este tipo de cirugía porque sabemos que la especialización en la técnica quirúrgica es primordial.

Es importante saber que los juanetes pueden reaparecer tras la cirugía si no se corrigen las deformidades anexas (resto de dedos afectados) y si no se corrige la pisada con plantillas personalizadas, por ese motivo,  en nuestra unidad de podología tratamos la causa principal de esta deformidad, realizamos  una buena exploración biomecánica para detectar y aplicar el  mejor tratamiento  para su prevención y evolución.

Aconsejamos algunas medidas que podemos tomar desde ya para evitar los síntomas dolorosos o evitar su evolución: 

  • Usar zapatos de horma y pala ancha con un tacón no superior a los 4 cm y que no sean muy rígidos.
  • Hielo durante unos 5 minutos-pausa hasta que se temple la zona-aplicación de nuevo del hielo otros 5 minutos (repetir varias veces hasta que pase el dolor) o pomada antiinflamatoria en la zona del bulto doloroso (bunion).
  • Realizar una evaluación biomecánica y plantillas personalizadas.

En Policlínica del Río-Hortega, en nuestra unidad de podología tratamos la causa principal de esta deformidad. Existen varias soluciones cuando ya se han desarrollado y sólo una manera de prevenirlos. Realizamos una buena exploración biomecánica para detectar y aplicar el mejor tratamiento para su prevención y evolución.