Podología Infantil: El cuidado de los pies no tiene edad

El pie pediátrico se encuentra en una etapa de crecimiento, desarrollo y formación continuo. Para que pueda crecer y desarrollarse como es debido, es importante realizar estudios para detectar alteraciones estructurales y funcionales a edades muy tempranas.

Realizar un estudio biomecánico de la pisada entre los 4 y 6 años, permite analizar los movimientos que se producen en el cuerpo durante la marcha, en los pies, cadera, rodilla o columna.

Un seguimiento de la evolución de la pisada nos puede ayudar a detectar patologías, a la vez que puede marcar la diferencia entre aplicar un tratamiento u otro.

Pero, ¿cuándo debemos acudir al podólogo con nuestro hijo/a?

Los problemas más habituales que encontramos en pacientes infantiles son:

  • Pies planos.
  • Caminar con los pies hacia dentro o hacia fuera.
  • Marcha de puntillas.
  • Deformidades en los dedos (montados, desalineados…).
  • Piernas en ‘X’ (Genu valgo).
  • Diferencias de longitud de los miembros inferiores.
  • Disminución de la estabilidad ⠀
  • Enfermedad de Server (dolor en el talón)

La mayor parte de problemas en los pies y la marcha pueden solucionarse mediante tratamientos sencillos como ejercicios adaptados, plantillas personalizadas y férulas entre otros.

En la Unidad de Podología de nuestra Clínica, sabemos lo importante que es la salud de los pies de los más pequeños, por ello les damos el cariño y el trato especial que se merecen.