Metatarsalgias… ¡necesito un podólogo ya!

Las metatarsalgias (-algia=dolor) son los típicos dolores en la zona delantera de los pies. Son debidas a deformidades óseas y desgaste de la almohadilla plantar en esa zona, aunque también se dan episodios de molestias en corredores, deportes de salto, permanecer mucho tiempo de pie y tras usar un calzado inadecuado. Sólo las causadas por los dos últimos ejemplos son de poca importancia ya que con reposo, hielo o la aplicación de alguna crema calmante suelen pasarse, pero cuando ocurren por el resto de causas es mejor acudir a un profesional de la podología para que te evalúe y de solución.

En ocasiones un solo factor puede causar el dolor pero lo más común es que sean varios en conjunto los que actúen en esta afección:

  • Mucho arco en el pie
  • Dedos en garra
  • Juanetes
  • Segundo dedo más largo
  • Calzado inadecuado
  • Exceso de carga: por sobrepeso o por sobreentrenamiento (corredores de larga distancia, baloncestistas, jugadores de pádel…)
  • Neuritis intermetatarsales (inflamación de algún nervio interdigital: el conocido Neuroma de Morton)
  • Tener artritis suele estar relacionado en algunas ocasiones

El problema de no tratar la metatarsalgias, además de tener que soportar el dolor, conlleva a una marcha antiálgica (anti-dolorosa) provocando así en el tiempo dolor por sobrecarga en cualquier otra parte del cuerpo como talón contrario, rodilla o cadera contrarias. Por ello, en muchas ocasiones acudimos al fisioterapeuta para tratar ciertos dolores en las articulaciones e intentar buscar el problema en esos puntos cuando realmente radica en la raiz: en nuestros pies.

El uso de plantillas personalizadas que absorban los impactos y soporten el arco del pie previene estas patologías y minimiza el porcentaje de acabar en quirófano.

Cuando veas o notes algún tipo de anomalía en tus pies, acude a un profesional de la podología. De tus pies depende, en gran parte, el resto de la estructura de tu cuerpo.